
Demostrado: T-Mobile confirma lo que era un secreto a voces y muchos ya no lo ocultan
El operador está adoptando una serie de medidas que no complacen a todo el mundo y eso puede tener consecuencias
En los últimos meses, ha comenzado a circular una creciente ola de rumores que señalan la creciente insatisfacción de los trabajadores de T-Mobile. Aunque muchos de estos rumores eran solo susurros entre pasillos, ahora la propia empresa ha confirmado lo que muchos ya sospechaban. El operador está tomando decisiones que están afectando seriamente a sus empleados y, en consecuencia, a su operativa diaria.
Los trabajadores de la compañía, especialmente los que se encuentran en la línea de ventas, están comenzando a abandonar sus puestos. Sobre todo por la presión constante a la que están sometidos.
La actuación de T-Mobile
Recientemente, varios representantes de ventas de T-Mobile han decidido dejar la empresa debido a un nuevo requisito. Se trata del uso de la aplicación T-Life para gestionar un porcentaje significativo de sus transacciones. Y no se trata solo de nuevos empleados que no logran adaptarse.

Este malestar viene principalmente de trabajadores con años de experiencia en la compañía. Sienten que la presión por cumplir objetivos mensuales se ha vuelto insostenible. La combinación de la exigencia de usar T-Life para cada transacción y la constante necesidad de alcanzar metas irrealizables ha llevado a muchos a renunciar.
Uno de los exrepresentantes que dejó su puesto recientemente compartió en redes sociales su experiencia, como recoge Phone Arena. "Renuncié después de 8 años y medio de trabajo arduo. T-Mobile ya no es una carrera, sino un trabajo muy estresante con beneficios que, sinceramente, cualquier empresa ofrece hoy en día", apuntó.
Continuó diciendo que "la presión para que los empleados utilicen T-Life es insoportable. Es otra forma de exprimir a los representantes y sacarles el dinero". Este tipo de testimonios no son aislados, y es que muchos empleados han dejado claro que el ambiente de trabajo se ha vuelto más tóxico con el tiempo.
Lo que está en juego es el futuro de T-Mobile como proveedor de servicios móviles. La compañía parece estar orientada hacia un modelo completamente digital. Este operador está empujando a los clientes a utilizar T-Life para gestionar sus cuentas, lo que ha reducido la necesidad de personal en las tiendas físicas.

Sin embargo, este cambio está costando a la empresa en términos de recursos humanos. Los ex empleados no solo se quejan de las presiones por cumplir objetivos. También de cómo la compañía parece priorizar la tecnología sobre el bienestar de sus trabajadores.
Apuesta hacia un modelo digital
La transición hacia un modelo completamente digital podría marcar el final de un modelo de negocios que dependía de tiendas físicas y vendedores expertos. Aunque no está claro si esta transformación será definitiva, la presión sobre los empleados y la constante implementación de nuevas aplicaciones y requisitos es cada vez más evidente.
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