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Trump pone fin al delirio trans: los hombres ya no podrán competir contra mujeres
El presidente de los Estados Unidos elimina la ideología de género del deporte estadounidense
Lia Thomas era un chico estadounidense que, como nadador, pasó sin pena ni gloria en las distintas competiciones en las que participaba. No estaba ni entre los 400 mejores nadadores del país de su generación. Sin embargo, en su etapa universitaria, decidió cambiarse de sexo, hormonarse y empezar a participar en competiciones femeninas. Como resultado, empezó a ganar campeonatos y a batir récords uno detrás de otro. Incluso de nadadoras olímpicas.
Sus rivales protestaron. Alegaban, lógicamente, que una persona que durante 20 años fue un chico, competía con ventaja en la categoría femenina (por muchos bloqueadores de testosterona que estuviese tomando). El revuelo fue enorme. La cuestión se convirtió en un debate nacional que llegó incluso a traspasar fronteras. Hasta que la Federación internacional de natación se pronunció y prohibió a Lia Thomas participar en categoría femenina.
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El caso de Lia Thomas no se volverá a repetir. Por lo menos en Estados Unidos. Y es que esta pasada madrugada, Donald Trump ha firmado un decreto en el que se prohibía la participación de hombres biológicos en competiciones deportivas femeninas. Si hace unos años nos dijeran que se tendrían que firmar decretos para especificar que solo las mujeres pueden competir en categorías de mujeres, seguramente tacharíamos de loco a nuestro interlocutor. Sin embargo, así están las cosas en Occidente.
Donald Trump ha firmado el decreto rodeado de niñas y chicas. Unas niñas y chicas que, ahora sí, se ven protegidas a la hora de practicar deporte competitivo. Ya no habrá hombres con ventajas biológicas que, cómo han decidido cambiar de sexo, pueden pulverizar todos sus récords y arrasar en sus competiciones. La cara de felicidad de esas chicas lo decía todo. El presidente de los Estados Unidos ponía fin al delirio trans en el mundo del deporte.
"Nuestra administración no se va a quedar de brazos cruzados viendo a hombres golpear y maltratar a atletas femeninas", reivindicó Trump. Además también aseguró que negará el visado a aquellos "hombres que fraudulentamente afirmen ser atletas mujeres antes de los Juegos Olímpicos de 2028", que se celebrarán en Los Ángeles.
Donald Trump no lleva ni un mes al frente de los Estados Unidos y ya ha dejado tocada de muerte a la ideología de género del país. Primero firmó un decreto en el que se especificaba que solo hay dos sexos (a diferencia de lo que defiende la teoría queer, que afirma que hay decenas). Después exigió que las firmas oficiales de los trabajadores públicos dejaran de ir acompañadas de los pronombres (otro delirio de transactivismo). Más tarde prohibió las cirujías y tratamientos químicos en menores de edad con disforia de género. Y, ahora, con este decreto firmado la madrugada pasada, cierra por fin la puerta a la participación de hombres biológicos en categorías deportivas femeninas. El que es uno de los delirios más destacados (y que más perjudica a las mujeres) de la ideología de género.
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