
Así trata la princesa Leonor a los marineros de Elcano: hay imágenes que lo demuestran
Sale a la luz toda la verdad del trato que están recibiendo los marineros de Elcano por parte de la princesa Leonor
La princesa Leonor protagoniza una última hora surgida tras su paso por Valparaíso, Chile, donde estuvo bajo el foco mediático. Era la primera vez que se veía a la heredera tras sus fotos en bikini, y la primogénita de los reyes acaparó todas las miradas. Gracias a esto, hay imágenes que demuestran cómo trata Leonor a los marineros de Elcano: con respeto y ejerciendo de 'guía'.
En cada parada que realiza el buque-escuela, este abre sus puertas a los visitantes que deseen verlo por dentro. Aunque en estas visitas no suele estar presente Leonor, en Chile hizo una excepción y mantuvo una actitud cercana.

Se confirma el trato de la princesa Leonor a los marineros de Elcano
La princesa Leonor ya se encuentra de nuevo a bordo de Elcano rumbo a su siguiente destino: Perú. Antes ha pasado unos días en Valparaíso, Chile, donde ha podido disfrutar de su tiempo libre y de la gastronomía local. Era la primera vez que se veía a la heredera tras el escándalo de sus fotos en bikini y las miradas estaban puestas en ella.
Esto ofreció la oportunidad de confirmar con imágenes cómo trata la princesa Leonor a los marineros de Elcano: con respeto y haciendo de “guía”. Con total normalidad e igualdad con el resto de guardiamarinas, Leonor recibió a un grupo de visitantes en el buque. En su parada en Chile, se abrieron las puertas de Elcano para los curiosos y estudiantes que quisieran visitarlo.

Por regla general, la hija de Felipe no suele estar presente en las visitas guiadas, pero en esta ocasión hizo una excepción. Se sumó al resto de sus compañeros en igualdad de condiciones para dar la bienvenida a los visitantes. Lo que confirma el buen trato y la buena relación que la princesa Leonor tiene con el resto de marineros.
Durante el tour, mostró una actitud cercana y respetuosa con todos los presentes. Su interacción con la tripulación fue informal y amable, creando un ambiente distendido y natural. Pese a su condición como futura reina, durante la visita Leonor fue una más de los guardiamarinas.
En Valparaíso actuó como guía, mostrando el barco a estudiantes y compartiendo su experiencia. Esta disposición a liderar y compartir conocimientos refleja su compromiso con la formación de sus compañeros y su integración en la vida a bordo.
La princesa Leonor, como una más dentro de Elcano
La vida en el Elcano implica convivir en espacios reducidos y adaptarse a una rutina estricta. Leonor ha aprendido a organizar su espacio personal y a adaptarse a las condiciones del barco. Esta predisposición ha ayudado a que su relación con el resto de sus compañeros sea excelente.
Dentro del buque no se percibe a Leonor como heredera, sino como una más de los guardiamarinas. Participa en todas las actividades formativas y lúdicas, mezclándose con el resto de estudiantes a los que trata con educación y compañerismo. La tripulación se siente unida a ella y destaca la naturalidad con la que Leonor interactúa con todos ellos.

Este trato educado también lo reciben quienes, en algún momento, acaban interactuando con ella. Por ejemplo, durante uno de los descansos en Valparaíso, Leonor junto a un grupo de amigos comió en un restaurante local. El dueño del local confesó después el trato adecuado y respetuoso que tuvo la heredera con todos los trabajadores del restaurante.
No pidió nada extravagante y, lo único que se atrevió a solicitar es que, por favor, no le hicieran fotos. Una petición que, tanto los trabajadores como el resto de comensales, entendieron y respetaron. Leonor, con su trato exquisito, ha logrado conquistar a todos y está demostrando ser una digna heredera de sus padres.
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