Jarro de agua fría a los conductores: en estas vías colocarán turbo-radares hoy mismo

Las autoridades de Cataluña han decidido poner en marcha nuevas medidas en varias de sus principales carreteras. Esta decisión afecta directamente a los conductores, que se verán obligados a estar más atentos que nunca a la velocidad a la que circulan. Estas medidas llegan tras una serie de evaluaciones y un análisis de los puntos más peligrosos de la red viaria.

Aunque muchos conductores ya se han acostumbrado a la presencia de radares fijos y móviles, esta vez se presenta una actualización importante. A partir de hoy miércoles, el Servei Català de Trànsit (SCT) ha instalado nuevos dispositivos en varias carreteras. Este cambio busca reforzar la seguridad y reducir los accidentes.

¿Dónde estarán ubicados estos nuevos turbo-radares?

Los nuevos turbo-radares estarán ubicados en cuatro puntos específicos de las comarcas de Tarragona y Barcelona. En Tarragona, los dispositivos se instalarán en la C-14, a la altura de La Riba (Alt Camp), en la N-240, a Valls (Alt Camp), y en la AP-7, en Tarragona (Tarragonès). En la comarca de Barcelona, el radar se colocará en la N-340, cerca de Castellet y la Gornal, en el Alt Penedès.

Estos radares comenzarán a funcionar entre este miércoles y jueves, activándose en su totalidad para controlar la velocidad de los vehículos. Se espera que su presencia reduzca las tasas de siniestralidad, ya que se enfocarán en hacer cumplir los límites de velocidad establecidos en cada vía. Según las autoridades, estas medidas son esenciales para evitar accidentes graves y mejorar la seguridad vial en estas zonas.

Los turbo-radares, la nueva apuesta de Trànsit

La implementación de los turbo-radares ya empezó en 2024. Estos radares tienen la ventaja de ser fácilmente trasladables, lo que permite su instalación en lugares donde anteriormente no era posible colocar un dispositivo fijo. Su flexibilidad es clave para poder controlar la velocidad en carreteras menos transitadas o en zonas donde colocar radares fijos resultaba complicado.

Desde su estreno, los turbo-radares se han instalado en varios puntos de alta siniestralidad. Este tipo de radar ha demostrado ser eficaz para detectar infracciones de velocidad y, por ende, reducir el riesgo de accidentes. En este 2025, el SCT ha adquirido más de estos dispositivos para cubrir más de 150 puntos en toda Cataluña, lo que ampliará el control de velocidad en diversas rutas.

Además, la facilidad para desplazar estos dispositivos también permite realizar controles de velocidad en zonas menos visibles o con infraestructuras limitadas. De esta forma, los responsables del tráfico en la región pueden realizar ajustes sobre la marcha, mejorando la eficacia del sistema. 

Con estos nuevos turbo-radares y el incremento de los turbo-radares, el Servei Català de Trànsit sigue apostando por la mejora de la seguridad vial. Aunque algunos conductores pueden no recibir bien la medida, especialmente al ser sorprendidos por los controles móviles.