
Junts prepara su ofensiva final a Pedro Sánchez: la amnistía o nada
El PSOE solo podrá agotar la legislatura si hay una resistución política de Carles Puigdemont
Carles Puigdemont trazó un plan perfecto antes de dar sus siete votos para la investidura de Pedro Sánchez. Junts utilizaría su posición de fuerza en cada votación en el Congreso para forzar al PSOE a hacer concesiones. La prioridad eran las inversiones en Cataluña, el catalán en Europa, y sobre todo, la amnistía.

La diabólica estrategia de Junts ha condenado al PSOE a tener que sobrevivir en una legislatura infernal. A las negociaciones de infarto y el naufragio de los presupuestos se suma la latente amenaza de la moción de censura. Y lo peor está por llegar, porque Junts no se conformará con todo lo obtenido hasta ahora.
Los acuerdos por el traspaso de las competencias de inmigración y el reparto de menas no ha amansado la fiera. Justo cuando el PSOE creía tener la situación controlada, Junts se ha desmarcado este jueves votando junto al PP y Vox en contra de la Agencia Estatal Sanitaria. Es un toque de atención justo antes de la ofensiva de Junts para conseguir lo que realmente le importa, la amnistía para Carles Puigdemont.
Junts prepara una ofensiva final
El estancamiento de la amnistía en los juzgados ha sido un contratiempo que Junts no está dispuesto a pasar por alto. Tras resolver otras carpetas importantes, están dispuestos a abordar la negociación definitiva para la aplicación real de la amnistía. Y advierten que no bastará con una visita de Pedro Sánchez a Waterloo, que además llega tarde.
En el PSOE reconocen que la relación se ha deteriorado desde la aprobación de la amnistía y su no aplicación por parte de los jueces. Desde entonces, Junts ha votado sistemáticamente con el PP para tumbar una detrás de otra las leyes más importantes del Gobierno. Esto condena a Pedro Sánchez a una debilidad endémica que le impide desarrollar la acción de gobierno con la contundencia que requiere el momento.
Pero los socialistas tratan de ser optimistas y creen que la incompatibilidad con Vox impedirá que los postconvergentes se presten a una moción de censura. Esto les permitirá gobernar hasta 2027, aunque sea arrastrando los piés. Pero Junts prepara una ofensiva final que marcará un punto de inflexión en la legislatura, y que tiene que ver con la amnistía.
Amnistía o moción de censura
Carles Puigdemont asumió en octubre la presidencia de Junts pero no ejerce de líder de la oposición en Cataluña. Su papel ha quedado difuminado por el no cumplimiento de la amnistía, que le permitiría volver a Cataluña para iniciar su carrera hacia la Generalitat. Por eso toda su estrategia de desgaste del PSOE va encaminado a un asalto final.

Míriam Nogueras ha confirmado esta misma semana que en la próxima reunión con el PSOE en Bruselas abrirán la carpeta de la amnistía. Creen que ha llegado el momento de dar un ultimátum real a los socialistas -o amnistía o moción de censura. Los postconvergentes tienen claro que sin la restitución política de Carles Puigdemont, Pedro Sánchez no puede acabar la legislatura.
En Junts creen que el cumplimiento de este compromiso culminará el plan perfecto de Junts con Pedro Sánchez. Muchos critican ahora que Puigdemont sostenga el Gobierno socialista en Madrid, pero todo cambiará cuando se aplique realmente la amnistía. Mientras ERC se hunde, Junts renacerá con un Puigdemont restituido y las concesiones de Sánchez como botín para ofrecer a sus votantes.
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