
Alexia Putellas cuenta su duro inicio en el fútbol: 'Los primeros 100€ que gané...'
La capitana del Barça y de la selección revela en una emotiva entrevista cómo fue su primer sueldo como futbolista
Hoy, Alexia Putellas es mucho más que una futbolista, es la reina del fútbol femenino. Con dos Balones de Oro en sus vitrinas y el respeto del mundo entero, se ha convertido en un símbolo. Una líder en el campo, una voz fuera de él.
Para miles de niñas que sueñan con un balón en los pies, Alexia es la prueba viva de que se puede. De que con talento, esfuerzo y paciencia, se llega, pero no siempre fue así.
De los sueños al sacrificio
Antes de los trofeos, las ovaciones y los estadios llenos, hubo mucho trabajo en silencio. Horas de entrenamiento, viajes largos, y una familia que siempre estuvo ahí.
En una entrevista reciente con el diario As, desde la concentración con la selección, Alexia recordó un momento muy especial: su primer sueldo como futbolista.

Cuando le preguntaron en qué se lo gastó, su respuesta fue clara y conmovedora:
“Mi primer sueldo debieron ser 100€, en el Espanyol. Creo que se lo daba a mi padre porque había un peaje desde Mollet hasta la ciudad deportiva, donde siempre me llevaba a entrenar. Recuerdo que se lo daba para la gasolina y el peaje”.
Los sacrificios que no se ven
La anécdota ha tocado el corazón de muchos. No solo por lo que representa, sino por lo que revela: detrás de cada éxito, hay un camino lleno de sacrificios. No solo de ella, sino también de su familia.
Su padre, al que ella menciona con cariño, fue pieza clave. Día tras día, trayecto tras trayecto, él fue quien la acompañó. Y Alexia, con apenas unos euros en el bolsillo, ya pensaba en devolverle algo de todo ese apoyo.
La grandeza está en los detalles
Este tipo de gestos muestran lo humana que sigue siendo Alexia, pese a la fama. En un mundo donde muchos pierden el norte, ella se mantiene con los pies en el suelo.
Recordar esos 100 euros no es una simple anécdota. Es un símbolo, es la prueba de que, incluso los más grandes, empezaron desde abajo. Que las estrellas no nacen brillando, se logra con trabajo, humildad y apoyo.
Alexia Putellas no solo gana títulos, también gana respeto, porque habla con el corazón. Porque no olvida de dónde viene y porque inspira. A todas las niñas que empiezan hoy en una escuela de fútbol, su historia les dice: sigue soñando, sigue peleando, porque todo es posible.
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