
El problema que Carolina de Mónaco calló durante años: Alberto y Estefanía lo sabían
El primo de Carolina de Mónaco, Christian de Massy, revela entresijos de su familia, nunca antes conocidos
Los entresijos de la familia Grimaldi siempre han sido un tema de interés en el mundo de la realeza. Christian de Massy, primo de Alberto, Carolina y Estefanía de Mónaco, ha compartido detalles inéditos sobre su vida y sus relaciones familiares. Entre sus declaraciones más llamativas, se encuentra la opinión que sus tíos, el príncipe Rainiero III y la princesa Grace Kelly, tenían sobre Philippe Junot, el primer marido de Carolina.
Un matrimonio que no contaba con el beneplácito Real
Christian de Massy tuvo una estrecha amistad con Philippe Junot, antes de que este iniciara su relación con Carolina de Mónaco. El Barón de Massy recordó cómo la familia Grimaldi veía con malos ojos aquel matrimonio: " Grace y Rainiero lo odiaban, pobrecito".

La unión entre Carolina de Mónaco y Philippe Junot, celebrada en 1978, fue muy comentada y no contó con el apoyo de los monarcas. Finalmente, el matrimonio terminó en divorcio en 1980, un desenlace que, según Christian de Massy, sus tíos consideraron un alivio. La época dorada del Principado coincidió con los años de juventud del Barón quien recuerda con nostalgia aquellos tiempos.
"Para mí la mejor época fue cuando, por desgracia, los terroristas que mataron a Aldo Moro, obligaron a mucha gente a salir huyendo de Italia. Se vinieron a Mónaco personas del más alto nivel, eran gente con mucha clase, elegantes y se sabían divertir", explicó. Fue entonces cuando la prensa seguía de cerca a Carolina, y la vida nocturna de Montecarlo brillaba con un esplendor único.
Relaciones complejas y silencios reveladores
Christian de Massy habla sin tapujos de figuras como Philippe Junot y Stefano Casiraghi, segundo esposo de Carolina. Sin embargo, su actitud cambia cuando se menciona a Charlene de Mónaco, esposa del príncipe Alberto: "De Charlène no tengo nada que decir". El Barón pasó de puntillas sobre la princesa de Mónaco, evitando dar detalles sobre su relación con ella.

De Massy ha pasado gran parte de su vida viajando, lo que lo ha mantenido lejos, físicamente, del clan familiar. "No nos hemos alejado, pero nuestras vidas son muy diferentes, más de la mitad de mi vida la he vivido en el extranjero", relató. Su pasión por los viajes y su estilo de vida itinerante han hecho que tenga menos contacto con la familia Grimaldi en los últimos años.
Una vida marcada por la búsqueda de equilibrio entre el deber institucional y el deseo de libertad
Carolina de Mónaco ha vivido entre el deber monárquico y su anhelo de independencia, una dualidad también presente en otros miembros de su familia. Su vida ha estado ligada a las responsabilidades del Principado, pero siempre ha buscado su propio camino, alejándose del rígido protocolo de la realeza. Su historia refleja la compleja relación entre el compromiso con la Corona y el deseo de autonomía.
Las revelaciones en torno a su familia ofrecen una visión más profunda de los Grimaldi, una de las dinastías más enigmáticas de Europa. La vida de Carolina de Mónaco no solo ha estado marcada por su papel institucional, sino también por su fuerte carácter y las decisiones personales que ha tomado. Su historia es un reflejo de la tensión entre la tradición y la necesidad de encontrar su propio espacio en el mundo.
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