Confirmado: 'Com si fos ahir' da un giro gracias a Meritxell Huertas y Míriam Alamany

El próximo episodio de Com si fos ahir trae consigo una serie de problemas que pondrán a los personajes ante situaciones difíciles. Mientras algunos buscan integrarse en su entorno, otros se enfrentan a dilemas que les exigen valentía y acción.

Entre las historias que destacarán en este episodio, las tramas de Gina y Lídia, interpretadas por Meritxell Huertas y Míriam Alamany respectivamente. Así, ocuparán un lugar central, ya que se verán presionadas por una amenaza que podría cambiar la dinámica de su entorno.

Meritxell Huertas y Míriam Alamany tienen miedo de Ricard

Una de las tramas más destacadas involucra a Gina y Lídia, quienes se encuentran en una encrucijada a raíz de las amenazas de Ricard. Valeri, consciente de la gravedad de la situación, les pide que denuncien estos mensajes ante las autoridades.

Sin embargo, ambas mujeres se sienten intimidadas y temen las consecuencias. El miedo las paraliza y, a pesar de la insistencia de Valeri, no se atreven a dar el paso de hacer una denuncia formal. ¿Qué sucederá cuando las consecuencias de no actuar se empiecen a hacer notar?

El temor a las represalias se convierte en un obstáculo en un momento en el que la valentía es más necesaria que nunca. Este conflicto no solo afecta a la relación de Gina y Lídia con Ricard, sino que también pone a prueba su capacidad para lidiar con el miedo y la incertidumbre.

Joel se ve envuelto en un nuevo problema

Por otro lado, Joel continúa su proceso de integración en el Bar Ferni, aunque aún se siente algo fuera de lugar. Gracias a la ayuda de Griselda, de quien se ha hecho amigo, poco a poco empieza a adaptarse al ambiente del bar.

Sin embargo, no todo es tan sencillo. Quique remueve su mochila y encuentra un sobre con dinero, lo que podría generar conflictos inesperados. Mientras tanto, Cèlia se plantea seriamente dejar la Consultoría, desmotivada por las circunstancias.

Gemma le pide que lo piense detenidamente antes de tomar una decisión tan drástica. Cèlia, aunque tentada, decide hablar con el equipo y proponer algunos cambios en el funcionamiento del trabajo, buscando una forma de mejorar su situación.

Este episodio se perfila como una mezcla de tensiones emocionales, decisiones laborales y amenazas. Las tramas de Gina y Lídia, en particular, destacarán por la presión emocional que atraviesan, mientras intentan tomar la mejor decisión en medio de un clima de miedo.