Una mujer con expresión triste está superpuesta sobre una imagen de libros apilados y una tienda desenfocada en el fondo.
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Esta es la histórica librería de Barcelona que dice adiós para siempre: últimas horas

Un conocido negocio de la ciudad condal bajará la persiana para siempre tras el fallecimiento de su dueño

Barcelona se despide de otro de sus negocios más emblemáticos. En este caso, se trata de una librería que ha formado parte de la vida cultural de la ciudad durante décadas. Por sus puertas han pasado millones de personas y no son pocos los que guardan preciosos recuerdos en sus corazones.

Se trata de la librería Sant Jordi de Barcelona, que está a punto de cerrar sus puertas tras más de 40 años de historia. Ubicada en el corazón del Barrio Gótico, se enfrenta a su despedida definitiva con una liquidación especial. Desde el pasado fin de semana y hasta el cierre el 28 de febrero, todos los libros están al 50% de descuento y los carteles a un 20%.

En definitiva, la última oportunidad que tienen los amantes de la lectura de llevarse un pedazo de historia de la ciudad. La librería Sant Jordi ha sido, desde su apertura en 1983, un referente cultural en Barcelona. Fundada por Josep Morales, quien asumió la dirección en 1998, el negocio ha sido un lugar de encuentro para escritores, lectores y turistas.

Una librería con un cartel rosa que cita a David Bowie sobre la lectura y un letrero rojo de liquidación.

¿Por qué cerrará para siempre la librería?

Sin embargo, tras el fallecimiento de Morales en diciembre de 2024, el futuro del local se vio seriamente comprometido. La propiedad exigió un aumento de alquiler casi diez veces superior al actual. Lo que se presentaba como una cifra insostenible para un negocio pequeño y tradicional.

No obstante, la presión de los ciudadanos y el apoyo recibido por parte de los clientes de siempre, logró cambiar la situación. "La propiedad facilitará que continúe una librería, con un contrato asumible para un comercio como este", explicó Cristina Riera, viuda de Josep Morales. Aunque el alquiler se ha reducido, el obstáculo principal sigue siendo encontrar a un sucesor que se haga cargo de la gestión.

A pesar de los esfuerzos por mantener la librería en funcionamiento, Riera ha confirmado que, si no se encuentra un nuevo librero, la librería cerrará definitivamente este jueves. "No descartamos hasta el último momento que otra persona pueda coger el relevo y continuar con la librería", añade.

"Estamos apurando esta última semana, pero aún no hay nada cerrado", ha explicado a El Periódico. El cierre de la Sant Jordi ha movilizado a numerosos clientes que se han acercado para aprovechar las ofertas. Y, al mismo tiempo, despedirse de un lugar que ha sido parte de sus vidas.

Fachada de una librería llamada

Un lugar emblemático de la capital catalana

"La librería está llena, está viniendo mucha gente", confirma Riera. En diciembre ya se realizó una primera liquidación, con cientos de personas llevándose ejemplares de sus estantes. Ahora, con el fin de la librería a la vista, la venta continúa, aunque la incertidumbre persiste.

La familia Morales aún guarda la esperanza de que, en el último momento, alguien se haga con el legado de la Sant Jordi. De esta forma, se podría seguir con su historia. Mientras tanto, Barcelona dice adiós a uno de sus rincones literarios más entrañables.

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