Parliament Rejects Requesting Nuclear Extension Despite Blackout Costs

Las partes catalanas han mostrado una vez más este miércoles la benevolencia que ha estado gobernando las políticas en Catalonia con consecuencias catastróficas. El PP propuso en la Comisión de Transición Ecológica del Parliament solicitar la extensión de licencias para las centrales nucleares en la provincia de Tarragona.

La propuesta fue rechazada con los votos en contra de ERC, Comuns y CUP, y la abstención de Junts. El PP recibió apoyo de Vox.   

El PP recordó que la energía nuclear genera casi el 60% de la electricidad producida en Catalonia y cubre más del 50% de las necesidades energéticas del territorio. "Esta fuente de energía se ha vuelto indispensable para garantizar un suministro estable y asequible", declaró su portavoz Eva García. 

También recordó que "las energías renovables como la eólica y la fotovoltaica aún no tienen suficiente capacidad para reemplazar la capacidad nuclear a corto plazo". Esto es consecuencia, entre otras cosas, de la falta de inversión de gobiernos anteriores. Precisamente de aquellos partidos que más defienden las energías renovables.

El PP advierte que "el cierre programado de las plantas nucleares implicaría un aumento de la dependencia energética del exterior". Además de "un aumento de precios para familias e industrias, y un aumento en el consumo de combustibles fósiles". 

Vox a Favor, Junts se Abstiene

Por eso propusieron solicitar al Gobierno de España "extender las licencias de las centrales nucleares en Tarragona más allá de la extensión actual". También pidieron "defender la importancia estratégica de la energía nuclear como fuente de transición". Así como "promover medidas complementarias para fomentar la inversión en renovables", y "promover una comunicación transparente con los ciudadanos sobre la seguridad y sostenibilidad de la energía nuclear en Catalonia".

La propuesta contó con el apoyo de Vox, que recientemente propuso en el Parliament extender la vida útil de las centrales nucleares en Catalonia. También están a favor de invertir en innovación en el sector nuclear "como una fuente segura, limpia y estable". 

Más sorprendente es la posición de Junts, que una vez más ha mostrado su indecisión. A pesar de alinearse con empresarios en oponerse al cierre de plantas nucleares, esta vez se abstuvieron. Su portavoz Jordi Monell argumentó que "lo que necesitamos es soberanía energética, tener plenas competencias en energía".

Junts se ha abstenido en las dos últimas votaciones en el Congreso de los Diputados y en el Parliament donde la izquierda pidió el cierre de las plantas nucleares. En otros foros, Junts coincide con los empresarios catalanes en las consecuencias catastróficas del apagón energético.

La Izquierda se Basa en Esloganes

La izquierda ha rechazado la propuesta sin razones claras más allá de eslóganes y argumentos recurrentes. ERC defendió la necesidad de "garantizar la soberanía energética con energías renovables, sin afectar al territorio y con precios competitivos". 

Su portavoz Montse Vergés apeló al gobierno republicano de Pere Aragonès, que "sentó las bases para un nuevo modelo energético". Pero es precisamente la falta de inversión de gobiernos como el suyo lo que explica la falta de despliegue de renovables. Hasta el punto de que Catalonia está a la cola de España en inversión en energía eólica y fotovoltaica.

La CUP y el PSC coincidieron en la necesidad de avanzar en la transición verde y se mostraron a favor del cierre de las plantas nucleares. Pero ambos reconocieron las deficiencias del modelo energético actual. 

Los Comuns fueron más contundentes, cuyo portavoz acusó al PP y a Vox de "venir aquí a hacer lobby para las empresas energéticas". Más allá de eso, no proporcionaron datos consistentes sobre su defensa del cierre de las plantas nucleares. Sí afirmaron que "extender las plantas nucleares costaría entre 3,000 y 6,000 millones de euros", y que "Catalonia no tiene una solución viable para los residuos radiactivos".

También dijeron que "el combustible para nuestras plantas nucleares proviene de Rusia" y que "por eso países como Alemania han acelerado su cierre". Precisamente la decisión de cerrar las plantas nucleares fue uno de los principales fiascos del gobierno de Angela Merkel. Una decisión que arruinó a Alemania y la hizo más dependiente que nunca de Rusia.

5.4 Mil Millones en Sobrecosto

Según el reciente informe de la consultora PWC, el cierre de las plantas nucleares generará un sobrecosto de 5.4 mil millones de euros para Catalonia. La comunidad catalana será con mucho la más afectada por el apagón en toda España. Además, se perderán 10,500 empleos, y hará de Catalonia una región dependiente de Aragón.

Como con otras ocurrencias ecológicas, los costos del apagón nuclear terminarán siendo pagados por los contribuyentes a través de impuestos y facturas. Los empresarios catalanes apuestan por la descarbonización pero advierten que prescindir de las plantas nucleares llevará al desastre.

El cierre de las plantas nucleares ha abierto la primera grieta dentro del gobierno de Salvador, con la dimisión del director general de Energía Josep Maria Serena. A pesar de haber sido nombrado por Illa, cuyo gobierno apoya el cierre de las plantas nucleares, Serena estaba a favor de extender la vida de las centrales nucleares en Catalonia. El Govern ahora tiene una patata caliente en sus manos.