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Illa se ata a ERC y la oposición destapa su 'estafa'
Socialistas y republicanos muestran una complicidad máxima en el Parlament
El PSC encaró la legislatura con el plan de gobernar en minoría con el apoyo de ERC pero con una cierta autonomía. A la hora de la verdad, su plan se ha visto frustrado por su debilidad parlamentaria, la incapacidad para tejer otras alianzas y el juego político en Madrid. Esto le ha obligado a atarse a los Comuns y, sobre todo, a ERC.

El gobierno de Salvador Illa, muy ambicioso en sus planes, ha acabado siendo en muchos ámbitos una continuación del anterior ejecutivo de Esquerra. Su papel ha ganado peso en las negociaciones bilaterales con el Gobierno central, en el contexto de las concesiones de Sánchez a ERC y Junts. Esto le ha atado aún más a los republicanos.
Pero además, el PSC se ha acercado a ERC en su estrategia común contra el mantra de la extrema derecha. Los socialistas han acabado comprando el relato de los republicanos. Lo cual se ha evidenciado de una forma muy evidente en el Parlament, este miércoles.
Complicidad contra la 'extrema derecha'
La tensión escenificada por ERC con el PSC en los últimos plenos del Parlament se ha traducido en complicidad este miércoles. El diputado Josep Maria Jové pidió “contundencia” a Salvador Illa contra “la ola reaccionaria mundial que nos interpela”. Y le exigió ser “igual de duro contra el fascismo que dice ser independentista que con el fascismo españolista”.
“Usted y yo pertenecemos a partidos con diferencias sustanciales en algunos puntos. En este, ninguna”, le respondió Salvador Illa.
El President compartió la “preocupación” por la extensión de “mensajes de odio en las redes sociales”. Prometió “contundencia” para “decir basta” a este tipo de actitudes.

Más adelante, Salvador Illa volvió a hacer la pelota a ERC respondiendo a una pregunta del PP. Era sobre el adelgazamiento de la administración pública para evitar más despilfarro. Pero Illa aprovechó para decirle al diputado popular Alejandro Fernández que “lo único que nos conviene recortar es la deuda de Cataluña”.
Por si había alguna duda, Illa atribuyó a ERC todo el mérito del acuerdo de condonación de una parte de la deuda con el Estado. Una clara muestra del servilismo del PSC con ERC, con el juego político en Madrid como telón de fondo.
La oposición señala la 'estafa' del PSC
En su turno de palabra, el diputado de Vox Ignacio Garriga señaló el gran engaño del PSC. “Usted se presentó a las elecciones como la gran alternativa al separatismo, y ha resultado ser una auténtica estafa. Porque todas sus decisiones han endurecido las imposiciones de sus predecesores”.
Ha puesto como ejemplo la Consejería de Política Lingüística. “Cogió la secretaría, la elevó a consejería y puso al frente a un miembro de ERC”, dijo. En su respuesta, Illa volvió a agitar el fantasma de la ultraderecha preguntando a Vox si están “con Trump o con la UE”.
Illa está reproduciendo siempre que puede los mismos clichés que ERC. Por un lado intenta mostrarse cercano a ellos, transmitiendo la idea de que comparten los mismo intereses aunque con matices tanto en Cataluña como en Madrid. Por otro lado se deja arrastrar por la polarización ideológica atizada por los republicanos en la última legislatura.
Lo cual puede servirle a corto plazo para mantener una cierta estabilidad. Pero a la larga es un juego arriesgado porque, a juzgar por las encuestas, la ajustada mayoría que le mantiene en el gobierno tiene los días contados.
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