Europa Press Najat El Hachmi, la escritora cancelada que vuelve a sonrojar al feminismo proislámico
Ha criticado duramente a las organizaciones de izquierda que se oponen a la prohibición del hiyab
La escritora catalana de origen marroquí Najat El Hachmi fue puesta en la diana de la izquierda por su denuncia del carácter patriarcal y misógino del islam. Esta luchadora por la igualdad y los derechos de las mujeressufrió una campaña brutal tras ser designada pregonera de las Fiestas de la Mercè de Barcelona en 2023.
Su pecado, señalar al islamismo radical y su discriminación de la mujer con la imposición del velo islámico.
Najat fue pregonera pese a los intentos de veto de la izquierda | Agencia
Su ejemplo adquiere una especial relevancia hoy, 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. En España y Cataluña las manifestaciones feministas están copadas por las mismas organizaciones filosilamistas que intentaron vetar a Najar El Hachmi.
Pero no ha conseguido silenciarla, y esta misma semana volvió a sacar los colores a la izquierda proislámica. Fue a raíz de una manifestación de estudiantes en Parla contra la prohibición del hiyab en los institutos de Madrid. Llevaron la voz cantante las organizaciones de la izquierda radical y supuestamente feministas.
El Hachmi les dejó en evidencia con un demoledor artículo en su columna de El País.
Deja en evidencia al feminismo fundamentalista
Najat el Hachmi advierte de que “reivindicando un velo que es fundamentalista aunque quienes lo lleven no lo sepan, legitiman una imposición patriarcal y misógina”. Además, clama contra quienes ponen a las alumnas que llevan hiyab como ejemplo de dignidad. “La dignidad, ahora, es defender, difundir y normalizar el sometimiento”.
La escritora afirma sin tapujos que el hiyab “degrada la dignidad de las mujeres”.
Recuerda que “ninguna mujer se levanta un día por la mañana y decide que no va a salir nunca más a la calle con la cabeza descubierta”. De la misma forma que “tampoco llegamos por nosotras mismas a la conclusión de que mostrando nuestras melenas estamos incitando a la lujuria de los hombres”.
El velo islámico niega a las mujeres el derecho sobre su propio cuerpo | Europa Press
La autora explica que el hiyan nunca fue un tema de debate en el islam mientras las mujeres estuvieron encerradas. El porblema vino cuando las mujeres descubrieron las libertades occidentales "y no quisieron conformarse con menos".
"Accedieron a la educación y a la independencia que da el trabajo remunerado, se pusieron pantalones y se deshicieron del engorroso velo. Los padres, los maridos, los líderes religiosos se estremecieron ante tal revolución. Fue entonces cuando inventaron el hiyab, ese pañuelo ceñido con imperdible que nada tiene que ver con las pañoletas tradicionales", escribe.
La izquierda tiene un problema
Las palabras de Najat El Hachmi retruenan este 8-M en las calles de Cataluña, donde organizaciones que defienden el velo islámico gritarán a favor de la igualdad de las mujeres. Forma parte de la gran contradicción de la izquierda posmoderna. Su visión de la realidad está atravesada por un relativismo cultural combinado con el odio a occidente.
En virtud de esto, cualquier derecho, sea el de las mujeres o el de los homosexuales, acaba siendo sacrificado en favor del respeto a las otras culturas. Cualquiera que ose desafiar esta postura es susceptible de ser víctima de la cancelación. Como le sucedió a Najat El Hachmi.
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