Alfred Bosch carga duramente contra Oriol Junqueras y anima la guerra dentro de ERC
Los críticos se resisten a irse y plantean una oposición interna que puede llevar el partido a la escisión
La victoria de Oriol Junqueras ha sido recibida con fair play por parte de la lista derrotada, Nova Esquerra Nacional. Los roviristas reconocieron la victoria de Oriol Junqueras y su legitimidad para encabezar la nueva etapa del partido. Pero también lanzaron un órdago a Militància Decidim.
“Nosotros nos quedamos en ERC al servicio del partido, y contribuiremos a hacerlo grande desde el espacio de la izquierda nacional”. Así se expreso Xavier Godàs tras confirmarse su derrota. Advirtió que "hoy no acaba nada, todo empieza".
Teresa Jordà, de Nova Esquerra Nacional, admitió que "el resultado es claro" y que "toca una reflexión por parte de todos". Pero al mismo tiempo desafió a Joan Tardà y su sugerencia de que ERC deje de ser un partido exclusivamente independentista: "Me encontrará de frente".
La sensación es que la victoria de Oriol Junqueras no acabará, al menos a corto plazo, con la guerra interna en ERC. Pese a haber ganado el plebiscito del congreso nacional, Junqueras ha recibido una avalancha de críticas desde dentro de su propio partido. La más dura la de Alfred Bosch, líder de la candidatura derrotada Foc Nou y de los sectores críticos.
Sigue la guerra en ERC
Alfred Bosch ha publicado un duro artículo contra Oriol Junqueras en El Món. El exconsejero anima a los independentistas radicales del partido a quedarse para hacer de contrapeso a la nueva dirección. "No os rindáis, no rompáis el carnet, ahora es el peor momento de hacerlo, cuando parece que la pesadilla se imponer", ha dicho.
"Cuando había la sensación de que todo podía cambiar", lamenta, "el 52% de los compañeros votan seguir haciendo negocios con el poder español". Culpa directamente a Junqueras de "haber guardado la independencia en un la despensa" y "pactar con el poder español".
De hecho, sus palabras más duras son contra el presidente reelecto de ERC. "Que el líder de los últimos trece años, prisionero político y víctima idolatrada de la represión no llegue ni al 50% de apoyos es un revés fenomenal", apunta. Atribuye su victoria al "clientelismo" y vaticina "una caída del partido" en los próximos meses y "nuevos batacazos".
Al borde de la escisión
Alfred Bosch recuerda que en los últimos años se han dado de baja 2.000 militantes, y que el partido se va haciendo cada vez más pequeño. Nova Esquerra Nacional y Foc Nou llaman ahora a la resistencia interna. Pero su espacio de influencia se reduce enormemente.
Con el partido dividido, una dirección sin un respaldo claro y los sectores críticos haciendo oposición interna, ERC queda al borde de una escisión. Oriol Junqueras se ha marcado como prioridad la recomposición del partido, que pasa por frenar la división interna e impulsar la regeneración. Pero a tenor de lo expuesto por Bosch, la guerra no solo no acabará sino que parece que va a avivarse.
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