La sobrina de Lady Di y prima de Harry lo confirma: 'Ha sido un infierno'

Beatriz de York ha decidido compartir su experiencia más personal y difícil: su embarazo prematuro. La hija del príncipe Andrés y Sarah Ferguson ha revelado las angustias que vivió, enfrentando problemas y miedos. En un artículo sincero para Vogue Reino Unido, Beatriz abre su corazón y habla de la incertidumbre mientras esperaba a su hija Athena.

El parto prematuro de Athena en enero de 2024 fue solo el inicio de una experiencia emocionalmente desafiante para Beatriz. La princesa de York ha sido honesta sobre lo que sintió durante esos momentos. En su artículo, describe el temor que la embargó, el miedo a lo desconocido y cómo, a pesar de estar rodeada de apoyo médico, vivió una angustia constante.

Un embarazo lleno de incertidumbre y ansiedad

Beatriz contó que, después de realizarse ecografías rutinarias, los médicos le informaron que su bebé necesitaría seguimiento cercano. Pronto, se dio cuenta de que debía prepararse para un parto prematuro. Aunque el diagnóstico fue alarmante, Beatriz nunca perdió la esperanza.

“¿Llegará sano? ¿Habrá complicaciones?”, se preguntaba constantemente, mientras las dudas no dejaban de rondar su cabeza. A pesar de los esfuerzos médicos, Beatriz se sentía impotente ante la incertidumbre. No sabía cómo afrontar lo que estaba por venir, pero encontró en la tecnología y en la medicina la herramienta para mantener la calma.

En el artículo, Beatriz también reflexiona sobre la salud femenina y cómo, en muchos casos, ha sido dejada de lado. A lo largo de su embarazo, se dio cuenta de que las mujeres deben lidiar con muchos obstáculos. Aunque ella tuvo acceso a la mejor atención, reconoce que muchas otras madres no tienen los mismos recursos o apoyo.

La lección aprendida y su nuevo compromiso

Al dar la bienvenida a Athena, Beatriz sintió un alivio indescriptible. “Sus pies eran tan pequeños que casi no podía creer que estuviera sana”, confesó. La princesa de York, que había pasado meses llenos de preocupaciones, finalmente pudo disfrutar de la alegría de ver a su hija en brazos.

En su columna, Beatriz subraya lo que aprendió: la lección de humildad al comprender lo mucho que desconocemos sobre el cuerpo humano. Ahora, con más conocimiento, quiere ayudar a otras mujeres que atraviesen situaciones similares.

Beatriz de York se ha comprometido a ser una voz para las madres que enfrentan complicaciones y dificultades en sus embarazos. A pesar de la gran diferencia, la princesa de York se siente conectada con las mujeres de todo el mundo que luchan en silencio. Quiere ofrecerles apoyo y ayudar a crear conciencia sobre los problemas que, generalmente, se mantienen ocultos.