
Esta es la solución de Rodrygo para ir al Mundial con Brasil: 'En enero me voy al...'
El delantero brasileño no se esperaba tener tan pocos minutos con Xabi Alonso
El arranque de temporada no ha sido nada sencillo para Rodrygo. El brasileño, llamado en su día a ser una estrella del Real Madrid, ha visto cómo su protagonismo ha caído del todo bajo las órdenes de Xabi Alonso.
Rodrygo apenas ha sumado 81 minutos en las tres primeras jornadas de liga, quedando relegado a un papel secundario que dista mucho de lo esperado.
La falta de continuidad preocupa dentro y fuera del club. En el mercado internacional han empezado a sonar las alarmas.
Según revela CaughtOffside, Rodrygo podría valorar un cambio de aires en el próximo mercado invernal si no logra revertir la situación.
Pep Guardiola no le quita ojo
El técnico catalán es un admirador confeso de Rodrygo desde hace años. Considera que su capacidad para moverse entre líneas, atacar los espacios y asociarse en corto encaja perfectamente con el estilo de juego que predomina en el Etihad Stadium.
Pep Guardiola cree que Rodrygo, lejos de perder confianza, podría explotar al máximo sus condiciones en la Premier League.

La prensa inglesa sostiene que el Manchester City estaría dispuesto a poner sobre la mesa cerca de 80 millones de euros, siempre que antes logre desprenderse de algún jugador ofensivo.
Uno de los señalados para dejar espacio sería Savinho, también brasileño, lo que abriría una puerta directa a la llegada de Rodrygo.
Tranquilidad en el Santiago Bernabéu
Sin embargo, en el Real Madrid la postura es distinta sobre Rodrygo. Se transmite calma y confianza en el talento del atacante, aunque internamente se reconoce que la situación empieza a ser delicada.
Xabi Alonso insiste en que las rotaciones marcarán el curso y que habrá minutos para todos. Sin embargo, las sensaciones dentro del vestuario son claras: hoy por hoy, hay varios futbolistas por delante de Rodrygo en la rotación ofensiva.

Rodrygo necesita un golpe de autoridad sobre el césped para volver a ser decisivo. Su margen de mejora es grande, pero el tiempo juega en su contra y nadie descarta que pueda concluir: "En enero me voy a Manchester".
De mantener esta dinámica, las dudas sobre su futuro aumentarán y la opción de una salida volverá a cobrar fuerza.
Entre quedarse o marcharse
El escenario abre dos caminos muy distintos para Rodrygo. O bien el Real Madrid se arriesga a dejar marchar a una de sus joyas, o bien Rodrygo logra reivindicarse en los próximos meses y recuperar la confianza del cuerpo técnico.
Todo dependerá de su capacidad para responder en los partidos grandes y demostrar que sigue siendo un jugador de nivel mundial.
Mientras tanto, Pep Guardiola observa con atención. En Manchester creen que su fútbol encajaría como anillo al dedo y esperan pacientemente un movimiento que podría cambiar la carrera del brasileño. La pelota, literalmente, está en el tejado de Rodrygo.
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