Gil Manzano recibe un severo castigo tras la Supercopa: 'Se va a quedar sin...'

Pese a la contundente victoria del Barça contra el Real Madrid en la final de la Supercopa de España, con resultado final de 5-2, no ha faltado la polémica arbitral. Todo sea dicho, polémica sí, por varias decisiones controvertidas, pero en ningún caso decisivas para el resultado final. Una actuación, la de Gil Manzano, que le puede costar muy cara.

La primera acción controvertida fue la no expulsión de Camavinga. El centrocampista blanco recibió tarjeta amarilla en el claro penalti que cometió, pero el árbitro, Gil Manzano, obvió enseñarle la segunda en un claro agarrón a Lamine Yamal. El agarrón fue clarísimo, cometido con los dos brazos y frenando un contragolpe peligroso para el Barça.

También hubo una segunda acción muy controvertida, un claro pisotón de Vinicius a Koundé: el '7' del Real Madrid pisó claramente a la altura del talón de Aquiles al francés. Gil Manzano no quiso saber nada, aunque la acción era merecedora de roja directa. Además, en la tarjeta roja a Szczesny también falló, pues tuvo que ser llamado por el VAR para verla.

Gil Manzano puede recibir un merecido castigo

Gil Manzano fue uno de los grandes protagonistas del partido con sus decisiones polémicas. Su actuación puede ser catalogada como muy pésima hasta el punto de tragarse dos acciones clarísimas en la que el VAR acabó salvándole. El claro penalti de Camavinga a Gavi fue la primera, y la clara expulsión de Szczesny al derribar a Mbappé, la segunda. 

Por fortuna, el arbitraje de Gil Manzano no fue decisivo teniendo en cuenta la gran superioridad del Barça sobre su rival. El problema para el árbitro extremeño es que se está jugando una plaza para arbitrar en el Mundial de 2026 que tendrá lugar en México, USA y Canadá. Lógicamente, actuaciones como la de la final de la Supercopa dejan a Gil Manzano en muy mal lugar, y más considerando que la audiencia en todo el mundo era máxima.

La reacción de Gil Manzano al acabar el encuentro

Gil Manzano acabó el partido muy abatido, siendo consciente de que no había completado una buena actuación. Antes de la final, afirmó que dirigir una final es una gran responsabilidad. Gil Manzano añadió que detrás de un árbitro hay una persona, un esfuerzo, un sacrificio y unos objetivos por los que se pelea.

Evidentemente, Gil Manzano se refería poder estar presente en el Mundial que tendrá lugar el próximo año. Y también advirtió antes del partido, que el ambiente a su alrededor estaba muy crispado y lamentó la poca colaboración que reciben los árbitros por parte del entorno del futbol. Probablemente, esta crispación y la consiguiente presión sobre su persona, pudieron condicionar la serie de errores que Gil Manzano acabó cometiendo.