Vista de una costa con casas coloridas y un bosque al fondo con un círculo borroso y un emoji triste superpuesto.
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Adiós a 79 años de historia: El conocido negocio de la Costa Brava que cierra

El bar ha bajado su persiana después de décadas de actividad y de convertirse en un punto de interés de Cadaqués

Cadaqués es uno de los pueblos con más encanto de la Costa Brava. Su especial ubicación y la historia que guarda en cada una de sus calles lo hacen único. Pero también destaca por su oferta turística, muy relacionada con el sector de la restauración.

Y precisamente en este punto es donde Cadaqués vuelve a ser noticia. Todo ello por el anuncio del cierre del Bar Boia, uno de los establecimientos más icónicos del pueblo. El bar ha cerrado definitivamente sus puertas tras casi ocho décadas de historia.

Fundado en 1944, este bar se había transformado en los últimos años en una reconocida coctelería, pero su trayectoria llegó a su fin el pasado 4 de enero. Desde entonces, sus puertas solo se han abierto para que sus responsables retiren el material restante del establecimiento. El cierre del bar se ha producido después de que una reclamación legal obligara a poner fin a la actividad.

Un bar iluminado al anochecer con un edificio blanco de estilo clásico y montañas al fondo.

Un bar que deja huérfano Cadaqués

Según Pere Vehí, propietario del Bar Boia, hace unas semanas recibieron una notificación de la Generalitat que fijaba el plazo máximo para operar hasta el 4 de enero. Esto no solo supone la pérdida de un punto de referencia cultural y social para los habitantes y visitantes, sino que también deja sin trabajo a 26 empleados. Aunque los propietarios han recurrido esta decisión, todavía no han recibido ninguna respuesta.

El futuro del bar y su concesión sigue siendo incierto, generando un sentimiento de pérdida en una comunidad que reconoce el Bar Boia como una parte esencial de su identidad. Cadaqués es un pueblo con un encanto especial que lo ha convertido en un lugar de peregrinación para artistas y escritores. Con sus casas blancas, calles empedradas y una ubicación privilegiada en la Costa Brava.

Este municipio ha sido una fuente de inspiración para figuras como Salvador Dalí. Históricamente, Cadaqués fue un pueblo de pescadores, relativamente aislado por su geografía montañosa. Este aislamiento permitió conservar su carácter tradicional, que todavía hoy atrae a visitantes de todo el mundo.

Vista de un pintoresco pueblo costero al atardecer con casas blancas y una iglesia iluminada en lo alto.

Mucho más que un bar

Con el paso de los años, la llegada del turismo a la zona se ha convertido en una de las principales fuentes de dinamización económica. El sector turístico es el motor principal de Cadaqués. Hoteles, restaurantes y comercios dependen de los miles de turistas que visitan el pueblo cada año, especialmente durante la temporada de verano.

Establecimientos como el Bar Boia no solo son puntos de encuentro, sino también espacios que ofrecen una experiencia cultural y gastronómica única. La desaparición del Bar Boia deja un vacío significativo en la oferta turística y cultural de Cadaqués. Cierra un bar que es y significa mucho más que eso.

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