Nadie esperaba lo sucedido con Marius Borg, hijo de Mette-Marit: 'Siempre estaré...'

Cuando el peso de las acusaciones se hace insoportable, las estrategias de defensa suelen dar giros inesperados. Marius Borg, el hijo de Mette-Marit de Noruega, se encuentra en el centro de una tormenta judicial que amenaza con hundir su imagen para siempre.

Durante el último año, ha acumulado una serie de escándalos que lo han llevado a ser detenido hasta en tres ocasiones. Sin embargo, lo que realmente ha conmocionado a la opinión pública son los graves delitos que se le imputan.

Las acusaciones incluyen agresiones, maltrato a dos de sus exparejas y una presunta violación a una conocida presentadora de televisión. La investigación sigue en curso bajo secreto de sumario, pero las pruebas en su contra parecen ser contundentes.

Marius Borg: un cambio de estrategia en plena crisis

Hasta ahora, la postura de Marius Borg había sido mantenerse en silencio, siguiendo la estrategia de su equipo legal. Sin embargo, ante la presión pública y el avance de la investigación, el joven ha decidido dar la cara.

Como parte de esta nueva etapa, ha optado por sustituir a su abogado, Øyvind Bratlien, quien lo había representado durante los últimos seis meses. A través de un comunicado de prensa, Borg ha querido despedirse de su anterior equipo de defensa con palabras de agradecimiento.

"Me gustaría agradecer a Øyvind Bratlien y sus colegas la asistencia jurídica que he recibido durante los últimos seis meses. Han estado a mi lado durante el período más difícil de mi vida. Siempre estaré agradecido por ello", ha expresado.

Marius Borg está en el centro de la polémica

La nueva encargada de su defensa será Ellen Holanger Andenæs, una abogada de renombre que ya ha comenzado a trabajar en el caso. Su llegada marca un posible cambio de estrategia para intentar mejorar la situación del acusado.

La pregunta ahora es si este movimiento será suficiente para cambiar el rumbo de un proceso que cada vez parece más complejo. Marius Borg se enfrenta a uno de los momentos más difíciles de su vida, y con el cambio de abogado, deja claro que está dispuesto a luchar por su defensa.

Sin embargo, con la presión mediática en su contra y la gravedad de las acusaciones, el futuro del hijastro del príncipe Haakon es incierto. Una situación muy dolorosa para Mette-Marit. Y es que es evidente que el caso ha golpeado su vida personal y su posición dentro de la monarquía.