La AEMET se adelanta y alerta de lo que llegará a España la primera semana de 2025

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha confirmado la llegada de lluvias a la península después de un prolongado periodo marcado por el dominio de las altas presiones. Con el inicio de 2025, frentes procedentes del Atlántico romperán la sequía meteorológica que ha caracterizado los últimos días del año.

Un inicio de año más templado

Entre el 1 y el 3 de enero, los sistemas frontales ingresarán desde el Atlántico y traerán lluvias, aunque también harán subir las temperaturas. Este ascenso se sentirá especialmente durante las noches, que serán menos frías en buena parte del país. Las heladas nocturnas, que hasta ahora han sido intensas y frecuentes en el interior y las zonas montañosas, como los Pirineos, comenzarán a remitir.

El cambio en las temperaturas estará asociado a la entrada de vientos del oeste, que arrastrarán masas de aire más templadas hacia la península. Durante el día, los valores máximos también experimentarán un ligero aumento, especialmente en las regiones atlánticas afectadas por los frentes. Esto contrastará con las temperaturas más bajas que han predominado en el final del año.

Un respiro tras semanas de frío intenso

La transición hacia temperaturas más suaves supone un alivio tras un periodo marcado por noches muy frías y heladas severas. Este ascenso térmico se percibirá de manera gradual, a medida que los frentes atlánticos avancen por el territorio. Galicia, el oeste del Sistema Central y la cornisa cantábrica serán las primeras zonas en notar este cambio, que luego se extenderá hacia otras áreas de la península.

Aunque las temperaturas subirán, la humedad y los vientos intensos podrán alterar la sensación térmica según la región. Las rachas más fuertes se registrarán en Galicia y en la cornisa cantábrica, lo que reforzará la percepción de un clima dinámico y típicamente invernal.

Este cambio de temperaturas coincide con el fin del dominio del anticiclón que ha marcado las últimas semanas. Las lluvias, el viento y el ascenso térmico darán paso a un invierno más activo, con condiciones variables propias de esta estación. La AEMET continuará monitorizando estos frentes para prever su impacto en otras regiones y actualizar las predicciones conforme avance el mes.

Con este nuevo escenario, la península se prepara para un inicio de año con un clima más templado y dinámico. Esto marcará un contraste con la estabilidad fría que ha predominado en diciembre.